Académica ICA3 recibe beca en el área de agroalimentación
La Dra. Catalina Pinto fue seleccionada en el Programa de Becas IILA-MAECI/DGCS del año 2024.
El Comité de evaluación de las candidaturas al Programa de Becas IILA-MAECI/DGCS 2024 para ciudadanos latinoamericanos, conformado por 13 miembros, entre ellos 7 expertos técnicos, otorgó un total de 12 becas, por periodos de entre 3 y 6 meses, en las áreas temáticas de agroalimentación y tecnologías alimentarias; sostenibilidad medioambiental y energías renovables; ciencias de la vida y biotecnología; ciencias y tecnologías espaciales; y conservación, protección y restauración del patrimonio cultural.
La académica del Instituto de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales (ICA3) de la Universidad de O’Higgins, Catalina Pinto, fue una de las ganadoras de la Beca en el área de agroalimentación y tecnologías alimentarias, lo cual le permitirá especializarse durante 4 meses.
Todos los becarios seleccionados realizarán estadías y/o cursos de formación de postgrado en instituciones italianas de excelencia durante el año 2024.
Entre los seleccionados en el área de agroalimentación y tecnologías alimentarias se encuentra los investigadores Juan Palacios Aparicio (Perú), Lisset Cardena Palazón (Cuba) y Catalina Pinto (Chile).
Durante su estancia de 4 meses en Italia, la académica UOH desarrollará el proyecto titulado “Fortaleciendo la Seguridad Alimentaria en Chile: creación de un Banco de Germoplasma inspirado en la Toscana“, con el objetivo de fortalecer la conservación y el uso sostenible de los recursos genéticos vegetales para la agricultura en la Región de O’Higgins. Este proyecto se beneficiará de la colaboración con expertos del Departamento de Ciencias y Tecnología Agraria, Alimentaria, Ambiental y Forestal (DAGRI) de la Università degli Studi di Firenze.
La investigación de la Dra. Pinto espera generar un impacto significativo tanto a nivel local como nacional, aumentando la seguridad alimentaria a través de variedades de cultivos más resistentes y nutritivos, mejorando así la productividad agrícola y la calidad de vida de las comunidades agrícolas locales. Además, la colaboración internacional con Italia fortalecerá las relaciones científicas y abrirá nuevas oportunidades para futuros proyectos conjuntos.