Exconsejero superior UOH es nominado al Premio Nacional de Historia 2024
- Marcial Sánchez, quien representó a la presidencia de la República en la UOH durante los mandatos de Michelle Bachelet y Sebastián Piñera, ha tenido una destacada carrera académica y ha dirigido importantes proyectos editoriales sobre la historia de la Iglesia en Chile.
El exconsejero superior de la Universidad de O’Higgins (UOH), Marcial Sánchez, es parte de la lista final de cuatro candidatos nominados al prestigioso Premio Nacional de Historia 2024. Su candidatura fue respaldada por la Sociedad de Historia de la Iglesia en Chile y diversos académicos y expertos en patrimonio.
“Para mí fue una gran sorpresa. Lo recibo con gran honor y humildad, ya que significa que el esfuerzo desarrollado en todos estos años para aportar a la historiografía nacional desde parámetros muy poco tratados, ha dado pasos agigantados que no había sopesado. El trabajo del historiador es aportar no buscando el reconocimiento, sino aportar al conocimiento del pasado y ayudar a que otros también crezcan en este mismo proceso”, apunta Sánchez.
Marcial Sánchez representó a la presidencia de la República en el Consejo Superior de la Universidad de O’Higgins (UOH) bajo los mandatos de los presidentes Michelle Bachelet y Sebastián Piñera. Su nombramiento como consejero superior no solo refleja la confianza depositada en él por dos administraciones consecutivas, sino también su profundo compromiso con la educación superior y la investigación histórica en Chile.
“Si bien he tenido varias responsabilidades directivas en distintas universidades en Chile, la más importante es haber sido parte del primer Consejo Superior de la Universidad de O’Higgins, como representante de la presidencia de la República. Fui inicialmente nombrado por la presidenta Michelle Bachelet y ratificado por el presidente Sebastián Piñera. Llevé esta responsabilidad con gran honor, ética y probidad, buscando siempre entregar lo mejor de mí en la conformación de esta nueva casa de estudios que hoy muestra sus frutos con cimientos duraderos”, indicó Marcial Sánchez.
El Premio Nacional de Historia, otorgado por el Ministerio de Educación desde 1974, será decidido a mediados de agosto. El jurado está compuesto por importantes figuras académicas y políticas: el ministro de Educación, Nicolás Cataldo; la rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés; el rector de la Universidad Católica de Valparaíso, Nelson Vásquez, representante del Consejo de Rectores y Rectoras de las Universidades Chilenas (Cruch); el vicedecano de la Facultad de Artes Liberales de la Universidad Adolfo Ibáñez y representante de la Academia Chilena de la Historia, Rodrigo Moreno; y el último ganador del premio, el historiador Rafael Sagredo.
Marcial Sánchez ha sido una figura central en la historia de la Iglesia en Chile. Su trabajo como director de la colección “Historia de la Iglesia en Chile”, publicada en cinco tomos por la Editorial Universitaria, ha sido ampliamente reconocido. Actualmente, Sánchez es profesor en las universidades Santo Tomás y Gabriela Mistral, e investigador en el Centro de Estudios Bicentenario. También es miembro del Núcleo de Historia Económica y Social de la Universidad de Chile y preside la Sociedad de Historia de la Iglesia en Chile.
Sus investigaciones se han enfocado en la historia del poder y económica desde la perspectiva de la Iglesia Católica, así como en relaciones internacionales e inteligencia artificial. Sánchez ha desarrollado la metodología de Historia Cognitiva, una innovadora forma de abordar temas relacionados con la religión.
Entre sus numerosas publicaciones, Sánchez ha dirigido tres importantes colecciones: “Historia de la Iglesia en Chile”, cuyo sexto volumen se publicará este año; “Templos de Chile”; y “Obispos del ’25”. Además, lanzará un nuevo libro a través de las publicaciones de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
“Desde que estudiaba Pedagogía en Historia me interesó el tema del poder y cómo este ha manejado la historia de la humanidad. Así, enfoqué mi mirada al ejercicio del poder en la Iglesia Católica, por lo que la colección Historia de la Iglesia en Chile, con el sello de la Editorial Universitaria, ha sido la mayor obra. Logramos aunar el trabajo de 46 investigadores en los cinco tomos ya publicados a lo largo de más de 10 años. Hay un sexto volumen en servicios editoriales que debiera salir este año, dando una nueva mirada a la historia nacional desde una de las instituciones que marcaron el devenir de nuestro país, la Iglesia”, apunta el exconsejero.
“Dentro de este mismo proceso, fue necesario generar una nueva metodología histórica para lograr entrelazar esta mirada científica de la mano de lo trascendental, que es la Historia Cognitiva. Esto se aleja de una historia salvífica y eclesiástica, otorgándole el espacio dentro de la investigación a elementos que son parte del ser humano y que no se entienden solo de un muestreo de hitos, fechas, procesos o actos aislados, sino de una forma de vivenciar los procesos históricos considerando al ser humano en su esencia integral”, agregó.
Su trayectoria académica incluye cátedras en diversas universidades y centros de formación en Chile y en el extranjero, tales como DUOC UC, Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidad Adolfo Ibáñez, Universidad SEK, Universidad Santo Tomás, Universidad San Sebastián, Universidad Cardenal Silva Henríquez, Universidad Gabriela Mistral, Universidad Finis Terrae, Universidade Cruzeiro do Sul en Brasil y el Ateneo Pontificio de Roma.
Sobre qué consejo le daría a los jóvenes historiadores que recién comienzan, Marcial Sánchez no tiene dudas. “No se dejen influenciar por quienes no les interesa, caminen firme, prepárense, fórmense, acudan a las fuentes. No se queden solo con lo que otros plantearon y no fueron cuestionados. Interpelen los documentos y las fuentes que siempre hay nuevas respuestas no observadas en ellos. La historia futura necesita de la historia pasada para seguir adelante. Deben ser entes activos en la sociedad, no sirve de nada producir y publicar solo llenando espacios de los anaqueles de bibliotecas. Este trabajo debe ir de la mano con intervenciones y análisis crítico de la realidad que sirva para otorgar miradas con conocimiento a los procesos propios del país como a nivel continental y mundial”.
La postulación de Marcial Sánchez al Premio Nacional de Historia 2024 destaca su valiosa contribución al conocimiento histórico y su compromiso con la educación y la investigación en Chile.