En el escenario actual, el panorama audiovisual chileno ha captado la atención a nivel internacional señalando un horizonte promisorio, que demanda una mayor profesionalización en toda la cadena de producción cinematográfica y televisiva.
Esto implica que los profesionales de este campo deben contar con conocimientos sólidos en gestión y producción que les permitan crear obras no solo de manera creativa, sino también desde una perspectiva empresarial.