Fernando González Ríos, un renombrado fotógrafo chileno, nació el 9 de agosto de 1932 en Machalí, localidad que en aquel entonces formaba parte de la Provincia de Colchagua. Desde temprana edad, su pasión por la fotografía se hizo evidente y, con determinación y perseverancia, se convirtió en uno de los grandes exponentes de este arte en la región.
En su juventud, Fernando se trasladó a San Fernando para continuar sus estudios, y fue allí donde dio sus primeros pasos en la fotografía de manera autodidacta. Su encuentro con René Combeau, un destacado fotógrafo chileno, marcó un antes y un después en su carrera. Combeau se convirtió en su mentor, enseñándole las técnicas de captura y revelado fotográfico, incluyendo la fotografía mural, una técnica que trabajaba con papeles fotográficos de gran tamaño.
Con los conocimientos adquiridos y la inspiración de su mentor, Fernando estableció su propio estudio fotográfico en San Fernando. Se dedicó a capturar retratos, eventos sociales y los lugares emblemáticos de la región, demostrando su habilidad y talento. Además, ejerció como corresponsal de prensa, llevando su arte más allá de la fotografía de estudio.
En medio de un período marcado por la dictadura militar, Fernando asumió el cargo de director de la Casa de la Cultura en San Fernando, entre los años 1980 y 1984. Durante ese tiempo, también intentó publicar el periódico “La Voz de Colchagua”, aunque no se le permitió. Su compromiso con la cultura y el arte se mantuvo firme, dejando una huella importante en la ciudad.
Por su destacada trayectoria y contribución al ámbito cultural, Fernando González Ríos ha sido reconocido como Hijo Ilustre de San Fernando. Su legado se ve plasmado en dos libros fotográficos: “Despertando los Recuerdos” en 2013 y “San Fernando en el Recuerdo” en 2014. Estas obras reflejan su pasión por capturar la esencia de su entorno y preservar la memoria colectiva de la región.
Actualmente, Fernando continúa colaborando en proyectos fotográficos y desarrollando su labor como fotógrafo independiente. Su valiosa contribución al Archivo Fotográfico y Documental de la Universidad de O’Higgins destaca su importancia en el desarrollo de la fotografía en la región. Sus imágenes capturan las costumbres, formas de vida, tradiciones y lugares emblemáticos, reflejando su mirada inquieta y creativa.
Fernando González Ríos, con su pasión por la fotografía y su incansable búsqueda de la belleza en cada imagen, ha dejado una marca indeleble en la historia visual de la región. Su legado perdurará en el tiempo, preservando la memoria y contando historias a través de sus fotografías, trascendiendo las barreras del tiempo y conectando generaciones.